Fuimos al chalet de Severiano porque queríamos unos días de descanso, con dos niños pequeños y lo pasamos muy bien. La casa está en medio de la carretera, entrando por un camino donde hay más chalets, muy bien comunicado. Está completamente equipada, la cocina es enorme y tiene menaje de sobra y todo nuevo, en general las habitaciones amplias y el exterior muy bonito y cuidado, un jardín muy agradable con varias zonas donde comer y pese al calor que hacía allí se estaba bien al estar cerca del mar ya que corría el aire. La playa de San Juan a 10 minutos en coche y Alicante a 15, supermercados a 5 minutos. A destacar la piscina bastante grande, con zona de césped para tumbarse, es lo que más disfrutamos. Y Severiano muy amable, nos ayudó en todo. Un sitio para repetir.