La casa es bonita y moderna, tal como aparece en las fotos, pero tuvimos una muy mala experiencia con la limpieza. Llegamos un sábado a las 13 y nos atendió la persona encargada de la limpieza. Nos recibió sin mascarilla y exigiéndonos todo tipo de papeles por el covid. Nos hizo hasta firmar un papel con las medidas covid cuando ella ni siquiera llevaba mascarilla. Nos pareció grotesco.
Después, cuando empezamos a deshacer las maletas, nos llevamos la nefasta sorpresa: marcas de dedos en puertas, armarios y TV; matas de pelos pegados a las puertas; uñas cortadas esparcidas debajo de la mesa de exterior… estaba claro que no habían limpiado y nos tocó hacerlo a nosotros. Lo peor fue el estado de las camas, almohadas y edredones. El olor era insoportable. Nos pusimos a lavar todo, creyendo que era la ropa de cama, y cuando vimos el estado de colchones, almohadas y edredones nos llevamos las manos a la cabeza. No se trataba de limpieza ya, sino de higiene. Había manchas de todo tipo, principalmente de sangre, incluso en los edredones y protectores de colchón. Esto no era evidentemente de un día. A mi hija pequeña le daban nauseas, sobre todo por el olor. Era simplemente asqueroso. Llamé a la persona de contacto, que dijo que vendría a vernos y no lo hizo, y a la segunda llamada me dio el contacto de su jefe. Después de exponer la situación, no se nos dio una solución para ese mismo día. Estábamos desesperados. Mirando ya para irnos a un hotel, aunque la mayoría estaban cerrados por el covid. Pensamos incluso hasta dormir en el coche…
A las 10 de la noche, después de suplicar que nos ayudaran, llegó la persona de contacto de muy malas formas. Entiendo que estuviera enfadada, pero somos clientes y no tenemos por qué aguantar encima los malos humos de una persona que no ha hecho bien su trabajo. Se puso a mirar los colchones (no le quedó más remedio que darnos la razón y asentar que estaban en un estafo deplorable) y a aspirar debajo de la cama de matrimonio - mejor no damos detalles. Dio la vuelta a los colchones, les puso un protector nuevo y trajo almohadas y ropa de cama nueva. No fue la mejor de las soluciones, pero al menos pudimos pasar la noche. El lunes vino a casa la persona de la agencia y entendió lo sucedido. Se quedó estupefacta al ver las fotos. Nos devolvieron el dinero de la limpieza y mandaron a otra persona para limpiar. La agencia reaccionó bien pero la situación nos pareció inaceptable y empañó nuestras vacaciones por completo.