El lugar es perfecto, aislado y super tranquilo.
El refugio está perfectamente equipado, la cocina tiene todos los utensilios necesarios incluso para cocinar para grandes grupos. La chimenea calienta toda la planta baja, incluso los radiadores de la planta de arriba. Además hay estufas de gas, con lo cual no se pasa frío en absoluto. Es ideal para familias, se pueden hacer excursiones sin necesidad de ir lejos, también hay una estación de esquí a unos 20 minutos aunque es pequeña (mejor ir a Formigal que está a 45 min). Los dueños fueron muy amables, nos explicaron todo y estaba todo limpio. Casi no hay luz, es mejor llevar linternas o farolillos de gas y usar velas. Parece un problema, pero para nosotros forma parte del encanto. Tienen unas placas solares que permiten generar algo de corriente para únicamente cargar móviles, tuvimos el pequeño problema de que apenas hizo sol el tiempo que estuvimos y las placas no se cargaban suficiente como para alimentar todos los móviles, es el único inconveniente.
Muy recomendable, volveremos seguro.
Mario